Discriminacion en Colombia. ¿Como estamos?
Todos los colombianos nos hacemos la misma pregunta, ¿Por qué somos un país subdesarrollado? ¿Qué nos pasa que no avanzamos? ¿Es culpa del Gobierno nacional? ¿Quién es el culpable?
No soy quien para decirles las respuestas, sin embargo, si hacemos uso del análisis deductivo de la realidad colombiana podemos llegar a diversas conclusiones.
Nuestra Carta Magna afirma en su preámbulo ” … y con el fin de fortalecer la unidad de la Nación y asegurar a sus integrantes la vida, la convivencia, el trabajo, la justicia, la igualdad, el conocimiento, la libertad y la paz…” y aludiendo al artículo 1 “Colombia es… democrática, participativa, pluralista, fundada en el respeto de la dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las personas que la integran y en la prevalencia del interés general.” Deduzcamos, ¿esto se ve reflejado en el país? Veamos.
Si observamos el preámbulo existen valores como la justicia, la igualdad, libertad, paz, conocimiento. En la realidad tenemos un fenómeno que nos aqueja, la discriminación. Colombia discrimina por moralidad en la cual “sabemos lo bueno y lo malo” y según la sociedad “las minorías”, es decir, los LGTBI, afro descendientes, indígenas, y muchas más; son “malas” por motivos religiosos o simplemente les dan asco. ¿Eso es digno de un país desarrollado?
Sigamos. El art. 1 establece cualidades que debe tener un Estado y en la cual aparecen ¨palabritas¨ como: Participativo, pluralista, dignidad humana, solidaridad, interés general. Al ser la discriminación un fenómeno en el cual se nos hace muy difícil eludir, y siendo un país como Colombia tan pluralista pero también tan costumbrista que en ocasiones preferimos nuestras creencias que nuestros derechos, hablar de solidaridad y dignidad humana es impensable.
Esta es nuestra realidad. Todos los que habitamos este hermoso país merecemos respeto. Somos afortunados por tener una diversidad cultural como la nuestra en el cual predomina los acordeones, artesanías, tambores, y muchas otras características. Sin embargo, parece que no lo notáramos, y hacemos lo imposible porque “las minorías” se vuelvan realmente minorías.
¿Podemos hacer este país mejor? Sí, pero tenemos que empezar por nosotros mismos inculcando los valores y principios que establece la constitución y dejar factores como la religión, la moral, entre otras, a un lado. Aristóteles nos dice que si estamos vivos podemos ser capaces, nosotros somos capaces de afrontar esto y vencerlo. La discriminación es una causa generadora de problemas comunes del país como la pobreza, desigualdad, inseguridad, falta de oportunidades, servicio de salud y educación, entre otras.
Para finalizar, no podemos ser ignorantes con la realidad que nos aqueja. No nos dejemos cegar. La unión hace la fuerza y ese es el camino ya. Pensemos lo que actuemos y busquemos la felicidad.
Manuel Romero Valverde
@MRomero1509